¿Un Peregrino para meter miedo?

Letreros, cuando un caminante decide dividir su trayecto en varias partes, suele contar con un hito en cada una de ellas: un edificio, un monumento o un paisaje. Apuntaos vuestros hitos…

Las palabras a emplear en cada etapa en esta ocasión son:

#EntrenaTusLetras #escritora #escritor #SinJugadoresNoHayJuego


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3 respuestas a «¿Un Peregrino para meter miedo?»

  1. Avatar de ENIAC
    ENIAC

    Hay ocasiones en las que el destino nos juega una mala pasada. Lo sabe bien el padre Emiliano, quien, acurrucado en la chimenea del hospicio de niños de Saint Paul (Minnesota), espera introducirse con el SACO mientras cae la nieve, que se acumula en su disfraz de Santa Claus.
    —¡Ay chihuahua, pues ¿no me dijeron que estaría abierta la compuerta de la chimenea? —¿y ahorita que hago, güey? ¿Me quedo en el TEJADO y me convierto en frigofray, o qué, Señor? —se queja, mientras suplica al cielo una respuesta de conexión divina, que por supuesto, no llega.
    Decide pues, forzar el acceso de la chimenea y entra. De pronto, tres vehículos del ICE aparcan justo en la entrada del hospicio. Llaman, entran y fisgonean. Se ha reportado la existencia de inmigrantes ilegales. Entonces lo ven: hecho un OVILLO, un barbudo con un traje sucio.
    —¡HO, HO, HO!

  2. Avatar de Jorge
    Jorge

    #Peregrino
    Con poco tacto me envías
    a tomar por SACO ya
    ¡calla la boca, papá!
    sin pensar si así me herías.

    Luego sales al TEJADO
    y amenazas con saltar;
    no me quieres escuchar,
    dices que soy un pesado.

    ¿Pesado como un ladrillo?
    ¿Pues sabes lo que te digo?
    ¡ya no cuentes más conmigo!
    Y aquí estoy, hecho un OVILLO.

  3. Avatar de Susana Amestoy
    Susana Amestoy

    Saco asombrado del bolsillo tu número perdido, amarillo de tantos años escondido en este viejo abrigo.

    Un vértigo malsano me recorre y mi estómago da un vuelco, como si cayera a un abismo desde el tejado.

    Ahora sólo me queda hacerme un ovillo y llorar por lo que nunca fuimos.

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